Una contraseña o clave es una forma de autentificación que utiliza información secreta para controlar el acceso hacia algún recurso. La contraseña debe mantenerse en secreto ante aquellos a quien no se les permite el acceso.
Para evitar riesgos derivados de una mala gestión de las contraseñas, te facilitamos unos consejos muy fáciles de aplicar:
- No compartas tus contraseñas con nadie.
- Asegúrate de que son robustas.
- No utilices la misma contraseña en diferentes servicios.
- Cuidado con las preguntas de seguridad.
- Utiliza gestores de contraseñas.
Para tener contraseñas las cuales nadie pueda robarnos o averiguar debemos:
Debemos asegurarnos que la contraseña tenga una:
- longitud mínima de ocho caracteres,
- que combine mayúsculas,
- minúsculas,
- números y
- símbolos.
No debemos utilizar como claves:
- palabras sencillas en cualquier idioma
- nombres propios
- lugares
- combinaciones excesivamente cortas
- fechas de nacimiento
Tampoco debemos usar claves formadas únicamente a partir de la concatenación de varios elementos. Por ejemplo: “Juan1985” (nombre + fecha de nacimiento).
Para poder recordar nuestras contraseñas podemos usar unas sencillas reglas:
- Cambiar las vocales por números (Mi familia es genial → M3 f1m3l31 2s g2n31l )
- Utilizar reglas mnemotécnicas ( Con 10 cañones por banda… → C10cpb… )
- Para hacer más sencillo el trabajo, podemos utilizar claves basadas en un mismo patrón, introduciendo ligeras variaciones para cada servicio. (Facebook → C10cpb…K / Twitter → C10cpb…R / Gmail → C10cpb…L )
- Dependiendo del servicio y de su importancia podemos utilizar claves más robustas o menos, para facilitar su memorización.
Algunos servicios ofrecen la opción de utilizar preguntas de seguridad para que podamos recuperar la contraseña. Sin embargo, muchas de estas preguntas son simples y cualquier persona que nos conozca mínimamente o que disponga de acceso a nuestras redes sociales podría averiguar la respuesta. Por ello, no debemos utilizar las preguntas de seguridad con respuestas obvias. Podemos facilitar una respuesta compleja o bien una respuesta falsa y sólo conocida por nosotros.
Si queremos almacenar nuestras contraseñas de manera segura podemos utilizar un gestor de contraseñas, debemos tener en cuenta las siguientes consideraciones:
- La contraseña maestra que utilicemos para acceder debe ser segura y robusta ya que será la que nos dé acceso al resto de claves.
- Si olvidamos esta clave no podremos acceder al resto de nuestras contraseñas, por tanto, debemos memorizarla bien en nuestras cabezas.
- Debemos realizar copias de seguridad del fichero de claves, para evitar perder las claves almacenadas.
Fuente de información: https://www.osi.es/es/contrasenas
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